Dónde alojarse en Dubrovnik: barrios con historia, vistas y mucho encanto

Dubrovnik, la joya que se asoma al Adriático

Dubrovnik no es solo una postal bonita, es una ciudad que se mete bajo la piel. Caminar por sus murallas, perderse entre calles empedradas y ver cómo el mar Adriático se vuelve dorado al atardecer… no hay foto que le haga justicia. Esta ciudad tiene algo mágico, una mezcla de historia, orgullo y mar que te engancha sin pedir permiso. Además, es pequeña pero matona: todo está relativamente cerca, pero elegir bien dónde dormir puede marcar la diferencia entre una escapada buena y una inolvidable. Porque sí, en Dubrovnik hay zonas para todos los gustos… y bolsillos.

La mejor zona donde alojarse en Dubrovnik: el Casco Antiguo (Stari Grad)

Dormir dentro de las murallas de Dubrovnik es como colarse en una película… pero sin guion.

Aquí no hay que caminar mucho para entender por qué esta zona es la joya de la corona. Estás literalmente en el corazón de la historia, rodeado de iglesias barrocas, palacios con siglos encima y escaleras que no perdonan, pero que regalan vistas épicas. Te levantas, cruzas un par de callejones, y ya estás desayunando con vistas a la catedral o tomando un café donde antes se paseaban nobles y comerciantes del Adriático.

¿Lo bueno? Todo está a un paso: restaurantes con encanto, museos, tiendas, y por supuesto, el acceso directo a las murallas. ¿Lo no tan bueno? Es la zona más cara y en temporada alta puede estar a reventar. Pero si es tu primera vez en Dubrovnik y quieres vivirla a lo grande, este es el sitio. Ideal para viajeros que priorizan la experiencia sobre el presupuesto. Si vas en pareja, más romántico no puede ser.

Otras zonas recomendadas donde alojarse en Dubrovnik

Ploče: vistas de postal y lujo tranquilo

Si quieres dormir con vistas al Casco Antiguo sin meterte en el bullicio, Ploče es tu barrio.

Esta zona empieza justo al salir por la Puerta de Ploče, al este de las murallas, y lo tiene todo para que te sientas como en una peli de James Bond (pero con más chapuzones y menos persecuciones). Aquí están algunos de los hoteles más top de la ciudad, con terrazas que miran al mar y a la silueta de Dubrovnik iluminada por la noche.

Es una zona muy tranquila, perfecta si buscas paz sin alejarte demasiado de la acción. En 10 minutos caminando estás dentro del casco histórico, pero sin tener que escuchar maletas rodando ni grupos de turistas a las 7 de la mañana. También tienes cerca la playa de Banje, que aunque sea turística, se disfruta mucho entre chapuzón y cóctel. Ideal para viajeros que quieren confort, vistas y un poco más de espacio personal.

Lapad: playa, relax y precios más amables

¿Te va más la vida de chiringuito, paseos junto al mar y ambiente local? Lapad te va a gustar.

Esta península al oeste del centro es la opción perfecta si quieres desconectar del ritmo del casco antiguo pero seguir teniendo Dubrovnik a tiro de piedra. Aquí todo es más relajado y, lo mejor, más barato. Los alojamientos suelen ser más amplios, muchos con balcón y cocina, y perfectos si vas en plan familiar o te apetece estar unos días sin depender de restaurantes.

Lapad tiene una playa bastante maja (aunque no esperes arena blanca) y un paseo marítimo con bares y terrazas donde se cena bien sin dejar medio sueldo. También hay zonas verdes, buen acceso en bus al centro y hasta un par de calas escondidas que puedes descubrir si te va lo de explorar.

Perfecto para quienes buscan una Dubrovnik menos turística, sin renunciar a comodidad y mar.

Gruž: puerto, mercado y ambiente local

Gruž no tiene el glamour del centro, pero tiene alma, y de la buena.

Este barrio portuario es como el backstage de Dubrovnik: aquí llegan los ferris, está el mercado central y se respira el día a día de la ciudad. No vas a encontrar callejones de piedra ni monumentos, pero sí buen pescado fresco, panaderías con encanto y precios bastante más razonables.

Además, desde aquí puedes moverte con facilidad a otras islas (como Lokrum o Mljet) o incluso hacer excursiones de un día. Hay bastantes apartamentos y habitaciones privadas, y algunos con vistas al puerto que, oye, tienen su encanto.

Gruž es una opción inteligente si quieres ahorrar, moverte con libertad y vivir Dubrovnik desde otra perspectiva. Ideal si vienes con mochila, espíritu viajero y ganas de mezclarte con los locales. Y si alquilas coche, aparcar aquí es mucho más fácil que en otras zonas.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio